No todas las fotos tienen su mejor existencia en blanco y negro, pero el revelado a color se hace difícil para alguien que primero trató de pintar.

Todo mi yo me pide manipular la fotografía, me es irresistible no jugar con la infinidad de posibilidades que ofrece mi amigo abobe. Hice el intento y ejercí moderación, pero sólo un poco. Las intervenciones reales tendrán su propio capítulo.

Estas fotos son un juego con el color, un experimento, un sentimiento de furia. Si tuviera un pincel las habría pintado incluso más brillantes. Es un intento de darle al objeto fotografiado su mejor expresión, espero haberlo logrado.

Aquí están, sea generoso al juzgarlas.